Reparación y venta de repuestos para bicicletas

Un pequeño taller de reparación de bicicletas y venta de sus respuestos, puede constituirse en una interesante alternativa para generar ingresos; se puede llegar a vivir de ello si el negocio crece lo suficiente, y generalmente emplea a por lo menos una persona además del propietario.
 
No se necesita tener conocimientos profundos en mecánica, para poder echar a andar esta idea de negocios de reparar bicicletas, dado que se trata de dispositivos con piezas y funciones simples; la simple experiencia práctica adquirida con la bicicleta propia, te habrá ya iniciado en este tipo de pequeño negocio, popular sobre todo entre los niños, que siempre acudirán en busca de que mantengan en buen estado sus medios de transporte y de diversión.
 

Lo necesario para abrir el taller

 
Juegos de llaves de tuercas, un pequeño compresor de aire (para inflar los neumáticos), piezas de todo tipo (desde armazones completas, hasta cables para los frenos, pasando por tornillos y radios para las ruedas), un local pequeño y cómodo, barato de construir y ubicado de forma tal que esté accesible a los niños o adultos que puedan necesitar de sus servicios... esto es lo básico de que hay que disponer para poder iniciar el negocio de reparación y venta de repuestos para bicicletas.
 
No necesitas tener un inventario muy grande de respuestos, y de hecho no es recomendable, pues te verías con una importante cantidad de efectivo inmovilizado, que no generará ganancias sino hasta que sea todo vendido; es preferible tener un pequeño estock de piezas que sean demandadas con regularidad, y luego solo una o dos piezas de aquellas que rara vez soliciten, para tenerlas como muestras de referencia. En caso de que alguien solicite un servicio con esa pieza, puede encargarla y hasta entonces tú deberás comprarla, para ofrecer ese servicio al cliente. Claro que esto puede tomar un par de días, y el cliente tendrá que esperar, pero es preferible a tener mucho dinero inmóvil, invertido en inventarios de respuestos que no rotan con frecuencia, puesto que la iliquidez es muy perjudicial para los negocios pequeños.
 
En la práctica encontrarás que los servicios más demandandos son: reparación de cauchos pinchados (o llantas ponchadas, si prefieres llamarlo así, ya que en cada país de nuestra hispanoamérica se usan diversas formas de expresión para referirse al mismo objeto o situación), cambio de "tacos" de freno, ajuste de la cadena, cambio de pedales, compra de pegatinas con las caricaturas de moda, y pintura al spray de algunas partes o toda la bicicleta.
 
Si te animas a emprender tu propio taller de reparación de bicicletas, regresa y cuéntanos tu experiencia, o si apenas estás pensando en hacerlo y tienes consultas para nosotros, con gusto las responderemos.

Éxitos con tus emprendimientos!