Ciertas personas se preguntan, cuál es la denominación para su estatus individual, si desarrollan negocios por su cuenta. Por ejemplo, si tengo mi propio negocio, soy un empleado o un ¿autoempleado? ¿Soy un dueño de negocio? ¿Soy un inversionista? Bueno, aquí compartimos con Uds. unas cuantas definiciones que ayudarán a esclarecer estas dudas.
Empleado: Persona que gana un sueldo por el trabajo que realiza, sin ser dueño de los medios de producción.
Autoempleado: Persona dedicada a una actividad remunerada, en forma independiente: albañil, plomero, modelo de revistas, abogado, consultor, dentista.
Dueño de negocio: Persona que posee un negocio o empresa, en la que puede o no ser empleado. Si es empleado de su negocio (por ejemplo y comúnmente: gerente), recibe un salario por su trabajo. Además de las ganancias (totales o parciales) generadas por su negocio. Pero puede también ser solo dueño de un negocio, sin ser empleado del mismo, y solamente recibir las ganancias generadas por el mismo (sin recibir un salario).
Inversionista: Persona que invierte dinero en una actividad lucrativa, para obtener réditos o beneficios. Puedes ser inversionista sin ser dueño de negocio o empleado (es decir, solo inviertes tu dinero y vives de tus rentas, como algunas personas que logran esto al "jugar" a la bolsa de valores). Pero todo dueño de negocio es inversionista, al menos parcialmente, en su propio negocio (también puede tener socios que inviertan en el negocio). Un empleado, puede ser inversionista del negocio en el cual trabaje, sin ser dueño del mismo. Ejemplo: Cuando ciertas empresas tienen un plan de venta de acciones entre sus empleados. En ese caso recibe un salario y una parte proporcional de las ganancias (aunque de hecho, los accionistas de una empresa son dueños también, hasta cierto punto, de la misma).
En el caso, por ejemplo, de un webmaster que vive del Internet, se trata típicamente de un autoempleado, puesto que realiza una o varias actividades por las cuales recibe una remuneración. Si su actividad aumenta, y necesita contratar empleados o subcontratar parte del trabajo que realiza, sería ya el dueño de un negocio (Micro, pequeño o mediano negocio - MIPYME).
Este último caso, sería válido que un webmaster (o un profesionista cualquiera), llamara a su actividad, "su negocio propio"; es una cuestión de semántica, lo límites no son rígidos; muchas veces, la legislación de cada país definirá finalmente donde inicia y termina cada categoría, lo cual tiene importantes implicaciones fiscales y burocráticas.
Coméntanos cuál es tu estatus actual, y cualquier duda que tengas, con gusto trataremos de despejarla. Saludos.